martes, 28 de diciembre de 2021

De mi ego

No siento vértigo

al asomarme al abismo 

profundo de mi alma.

Me estoy muriendo: 

más por fuera que por dentro

domingo, 26 de diciembre de 2021

El rayo verde o el que busca encuentra

 

No digo yo, que lo que os voy a contar a continuación tenga algo que ver con un acontecimiento mágico o prodigioso, no ¿O sí?. La cosa fue el resultado de la causalidad, el ensimismamiento y la curiosidad. 

La primera vez que tuve noción del rayo verde, fue una noche en la que sustituí la película que iban a emitir en el canal “SudanceTV”, (es como ver la segunda cadena en tiempos de Franco) cuyo título era, “El rayo verde”, que estaba clasificada como drama, por otra de suspense en otro canal.

Como la hora de emisión ni el metraje coincidían, cuando acabó la película por la que me decanté y estando a punto de empezar otra en SudanceTV, la cual quería ver, cambié a este canal y vi los últimos planos de la película: cuando los protagonistas esperan la puesta de sol, sentados en la playa y en el horizonte aparece, durante un instante, en la coronilla del astro, el color verde. La cosa no quedó ahí, porque me picó la curiosidad, tanto la de profundizar en el relato de la película como el de hacerlo en el episodio de la naturaleza.  

A veces, me venía a la cabeza lo del rayo verde: un fenómeno que consiste en la difracción de la luz del sol cuando aparece o desaparece por el horizonte de una superficie plana en condiciones atmosféricas especiales; pero lo que lo convierte en un prodigio es, poder captarlo ya que dura un par de segundos y hay que estar en la posición correcta, aproximadamente, a un metro y pico por encima del horizonte. Que conste que, esta pedantería, como viene siendo habitual y común a todos, la recopilé de internet junto con la reseña de la novela de Julio Verne (que no soy tan leído como algunos piensan) donde dice: “Que la protagonista, obligada a casarse con el hombre que su tío ha elegido para ella y del que no está enamorada, accede ha complacerle si ve el rayo verde. Pensando que esto es una leyenda, (de que quien lo observa, en solitario o con la persona a la que ama, garantiza la felicidad de por vida) se enfrasca en su búsqueda, acompañada de su prometido, con la intención de escaquearse”. Llego hasta aquí porque, ni he visto la película de Éric Rohmer ni he leído la novela de Julio Verne. Eso por un lado y, por otro, porque sería una falta de respeto hacia ambos el ir más allá de una mera introducción que despierte el interés por hincarles el diente.  

De cuando en cuando, fantaseaba con poder verlo alguna vez, pero, para ello, tenia que madrugar e ir a la playa de Las Arenas, o bien, a La Albufera, preferiblemente en verano cuando la superficie del agua está más caliente que la del aire y se produce el efecto espejismo y, para ser sincero, ando escaso de voluntad, o como dicen allá de donde vengo: “Soy más flojo que una cortina”. ¡Para qué me voy ha engañar!

Bueno, puestos ya en antecedentes, lo que me ocurrió fue lo siguiente:

Era un día como otro en el que me encontraba frente a la pantalla del ordenador, escribiendo, enfrascado en lo que “pretendía” que fuera un poema. Había acabado de tomarme el café de después de desayunar y deposite la jarra de vidrio sobre los cercos y manchurrones de café en una de esas notificaciones que nos envían por correo y que generalmente las uso para hacer anotaciones, en los espacios en blanco, de lo que se me ocurre cuando tengo el ordenador apagado (la verdad sea dicha, más que un reciclador, creo que soy un poco adán y tacaño). 

Aquel día de otoño, era bastante soleado y serían sobre las once y pico de la mañana. El sol buscaba su cenit fuera de la ventana, donde tengo la pantalla del ordenador, grande, de muchas pulgadas, encima de una mesa ad hoc, sembrada de papelorios (como el cenicero de colillas). 

Los rayos de luz entraban oblicuos por debajo de la pantalla y en una de tantas veces de las que me encuentro atascado sin saber por donde tirar, buscando la inspiración, se me fue el santo al cielo y la mirada perdida en un pequeño punto de luz que estaba fijado en la base del culo grueso de la jarra de vidrio. De él se proyectaban pequeños rayos de luz difractada (como en un prisma) en todas direcciones, y se podían apreciar los colores del espectro visible de la luz. Según movía la cabeza de derecha izquierda y viceversa, los colores cambiaban de longitud de onda e iban y venían de los tonos calidos a los fríos. Le presté atención, por esto, y porque iban disminuyendo de tamaño en una secuencia rápida hasta desaparecer y quedar solo, en el un punto desde el que partían, el color verde desvaneciéndose al instante.

Mi conclusión fue la de que acababa de ver el rayo verde y, para mi regocijo, sin salir de casa.

A veces, te equivocas de autobús y te lleva al sitio deseado (o algo así) dice un proverbio indú

Dando por hecho que, los buscadores de tesoros en el rastro, madrugan para ser los primeros y estando la playa a dos pasos… Yo, no digo nada. Ahí lo dejo.  


¡Feliz Año Nuevo!

viernes, 17 de diciembre de 2021

Autoestima

Odio, resquemor, venganza,

son las respuestas de un ego herido:

ciego que huye despavorido

dando bastonazos al aire

 


¿Quién se deja llevar por la falacia,

vuela al cielo

y cae al suelo

como el grano envanecido? 

El ego inflado



Yo deseo, soy , tengo…

un cerebro para investigar,

de qué pie cojea,

donde quiera que esté el ego

lunes, 13 de diciembre de 2021

Interior de un paisaje

Saco a pasear a mis oídos 

para que las neuronas se ventilen con la música: 

oxígeno que respiramos de naturalezas muertas: 

cueros, metales, maderas

domingo, 12 de diciembre de 2021

Un rito y un grito


Le llega la Navidad

al guiñapo de la acera

y la Áspera Trinidad:

frío, miedo y soledad

fue la que llegó primera


De la calle un inquilino

y de muerto la hopalanda:

entre cartones de vino

se acuesta el pobre genuino

y no en “sábanas de Holanda”


No me calcé tus zapatos 

porque dormías con ellos.

Te los quitabas a ratos;

lamías como los gatos

la impronta de tus resuellos


¿Cuáles fueron tus pecados

para tanta penitencia?

En campos de refugiados 

sigue tirando los dados

la divina providencia

sábado, 4 de diciembre de 2021

A ti te toca

En otoño, cuando las hojas caen,

por entre las ramas el sol se asoma. 

Quedan calvos los árboles del parque

y tan fugaces los días se tornan…


hasta el frío invierno del desencanto.

Dice el otoño que antes fue verano;

el verano, que antes fue primavera.

Serenos, van surgiendo y desplazando


como si dijeran: a ti te toca

por riguroso turno democrático.

Y de esta forma, de estrato en estrato,


la experiencia personal se acumula

en la vida y obra insignificante

de uno más entre otros seres sintientes

miércoles, 1 de diciembre de 2021

La ceremonia

    Recuerdo que era domingo y, mudados y peinados, nos compramos un cigarrillo rubio, (“de a una peseta” porque era de importación) cada uno y, escondidos en un solar (a la vista de todo el mundo) nos iniciamos en la pubertad, fumando y cagando en proletaria comunión.  

El cigarrillo había que sostenerlo entre los dedos índice y medio de la mano izquierda, si lo hacías con la derecha, eso era de maricones: decían los ya iniciados. 

Cagamos dispersos por el solar, sorteando a las ortigas que crecían entre los cascotes y piedras y, al acabar, nos limpiamos el culo con las hojas de un libro. 

Aconsejados por cortesía de los iniciados, finalizamos el rito, procurando evitar el impulso de introducir la colilla en la “gandinga” porque, como consecuencia, nos saldría un grano en el culo. 

                                              ******

    Hace ya casi sesenta años de aquella ceremonia iniciática y, a veces, al llevarme un Camel a los labios, percibo el aroma del comienzo del final de mi inocencia. Del resto de aquel día no me acuerdo; no creo que hiciéramos nada más memorable.

Más tarde, cuando acabé la escuela, aprendí a leer y escribir por mi cuenta y, desde entonces, nunca más le puse un ojo encima a las páginas de un libro: sino los dos de la parte superior de la cara y con respetuosa distancia.

sábado, 27 de noviembre de 2021

Del cínico progreso

El amor se creó con el universo,

y, en la tierra, está presente,

oculto, incandescente

bajo la espesa corteza

del cínico progreso

El clan

El sincero argumento es más eficaz

que el puño para deshacer la ira:

prima hermana del miedo.

Sabiendo el origen consanguíneo

del clan: miedo, ira, venganza, celos,

no le eches más leña al fuego con la palabra

y analiza la emoción, 

que hay detrás, en la construcción, 

de cada pensamiento.

Instantáneo

Hoy está lloviendo.

Respiro el aire que entra por la ventana

y descubro que el cristal refleja

el asfalto mojado

y las luces de los coches multiplicadas.

El café soluble, instantáneo, de la marca Hacendado

se me derrama y miro el cerco de la taza

en la hoja de papel en blanco.

Si no tengo nada que decir,

no escribo nada

domingo, 21 de noviembre de 2021

Feliz cumpleaños, Sayen



Cada día, cada mes, va creciendo el amor

comparable a la anchura de tu risa:

esa que aviva el corazón caliente.

¿Qué te puedo regalar sino mi tiempo?

¿A caso tu presencia no se mide por quilates?

Tu riqueza humilla al sufrimiento

si éste se pone por delante

¡A donde va a parar!

Vale más una sonrisa:

feliz cumpleaños, Sayen

sábado, 20 de noviembre de 2021

Fandango

Con la plancha me curré

y ya no me hablo con ella.

¡Ay, que a gusto me quedé!

Tanta luz no pagaré,

dicen: que “la arruga es bella”

jueves, 18 de noviembre de 2021

Todo por descubrir (Algoritmo)

        El reloj de pared, vintage de la década de los cuarenta, acaba de dar nueve campanadas pm., y con disciplina monástica, dejo lo que tengo entre manos y me dirijo al cuarto donde medito.

Es una habitación abigarrada donde apenas puedo extender una alfombra, de manufactura oriental, a la que pliego hasta reducirla a un metro de largo por unos cuarenta de ancho.

He encendido la luz porque es otoño y ya es de noche. Extiendo la alfombra en horizontal frente a la pared de la izquierda de la ventana, como a un metro y pico de distancia, y coloco un cojín en el suelo al borde de la alfombra, aproximadamente en el centro, y apago la luz.

Descalzo y con ropa holgada, me posiciono sobre la alfombra con los pies en línea con los hombros, la espalda recta, los brazos relajados, las rodillas ligeramente flexionadas y la pelvis hacia atrás. Permanezco así durante unos segundos, concentrado, respirando conscientemente y, a continuación, recojo simultáneamente el pie derecho unos centímetros hacia el centro, y el antebrazo izquierdo, lo llevo al pecho con el puño relajado. Repito la misma operación con el pie izquierdo y lo junto con el derecho y ambos antebrazos quedan  unidos por el puño de la mano izquierda con la palma de la mano derecha, a la altura del pecho y en paralelo al suelo. Inclino el torso con la cabeza recta mirando hacia delante, mientras expulso el aire lentamente y con esto saludo  

Me siento sobre el cojín que sobresale unos centímetros por encima de la alfombra. Con  la pierna izquierda flexionada, agarro la parte inferior con ambas manos, a la altura de los tobillos, y tiro de ella hacia atrás con relativa fuerza unas cuantas veces (este estiramiento ayuda para no lesionarse las rodillas) y luego, coloco el talón en el perineo. Repito la misma operación con la pierna contraria, y, sobre el muslo de la pierna izquierda, apoyo el empeine del pie, quedando ambas rodillas en contacto con en el suelo (sobre la alfombra) y armo la postura de medio loto. A continuación, apoyo las manos en las rodillas e inclino el torso hacia delante y hacia atrás varias veces. Después, con el dorso de las manos abiertas y apoyadas en los muslos, dirijo el torso de derecha a izquierda, con el fin de asentar bien la pelvis hacia atrás y que el coxis quede lo más levantado posible: por si se da el caso, peerme al cielo (esto último son palabras de sensei Taisen Deshimaru). Junto las palmas de ambas manos, a la altura del pecho, con los brazos horizontales, en paralelo al suelo, y saludo inclinando las manos y la cabeza hacia delante.

Lo siguiente que hago es, imitar el resto de la postura del buda: el mentón hacia atrás; el cuello y la nuca rectos; la coronilla como suspendida por un hilo invisible que tira de ella hacia el cielo; los hombros rectos; uno las manos por debajo del ombligo, con el dorso de los dedos de la mano izquierda sobre la palma de los dedos de la mano derecha y, los pulgares rectos y enfrentados en la punta, levemente unidos. Finalizo poniendo la lengua en el paladar y dirijo la mirada por encima de la nariz, con los ojos entornados, hacia un punto imaginario del suelo frente a mi como a un metro de distancia. Comienzo. 

Toda mi atención recae sobre la postura, en cuanto a, concentrarme para mantenerla mientras visualizo mi respiración serena y profunda. Inspiro lentamente por la nariz, y el diafragma progresa hacia bajo y los pulmones se expanden; expiro, y el diafragma empuja hacia arriba la base de mis pulmones y expulsa el aire lentamente (bien por la nariz o por la boca). Con cada respiración, repito: inspirando tranquilizo mi cuerpo, expirando sonrío, y dirijo hacia arriba la comisura de los labios.

Y esto es todo lo que tendría que hacer: concentrarme en la postura y la respiración. Pero, la mente no descansa y, al poco de iniciar la sesión, como las neuronas siguen produciendo sinapsis que van unidas a diferentes emociones agradables, desagradables, o bien, neutras, me aferro a los pensamientos y a la que me quiero dar cuenta, mi postura se ha descompuesto: los ojos se me han cerrado; el mentón se ha ido hacia arriba; el cuello se ha relajado; la espalda se ha encorvado y los hombros encogidos; una rodilla que se despega del suelo; los pulgares que apuntan hacia arriba o hacia bajo dependiendo de la euforia o depresión que el pensamiento me provoca. Permanezco en esta ensoñación, por no sé por cuanto tiempo hasta que me doy cuenta, y entonces, con las mismas, me recompongo y vuelvo a concentrarme, únicamente, en la postura y la respiración sin espíritu de provecho.

Y así, hasta no sé cuantas veces sucede esto de desconcentrarme y volver a concentrarme durante los veinte minutos que practico cada día. 


                                                ******


Este método de respiración lenta, profunda y consciente, respirando con el diafragma hinchando y deshinchando el abdomen y sintiendo como el aire entra y sale a través de las fosas nasales, aumenta la capacidad de los pulmones (frente al hábito arraigado de respirar solo con la parte superior) y hace que la sangre llegue más oxigenada al cerebro, con lo que se puede observar, con más calma, las emociones y pensamientos que constantemente produce nuestra mente. 

Luego está el libre albedrío de cada uno para aferrarse a lo que resulte agradable y rechazar lo que no nos gusta. O puedes optar por el término medio de no aferrarte a nada y dejarlos pasar sin apego ninguno. Ni montaña ni valle: los pulgares son como el piloto que se enciende y me alerta durante la meditación. 

La constancia me ha llevado a adquirir el hábito, no sin esfuerzo, de intentar permanecer en el instante presente, respirando profundamente cada vez que alguna emoción (positiva o negativa) altera mi ánimo. No es una pastilla milagrosa, pero me sirve para identificar mis estados mentales y me trae a colación la tradición  japonesa de celebrar, cada mes de abril, la floración de los cerezos que dura solo unos pocos días: preciosa metáfora de la impermanencia 


                                               ******


Y aquí lo dejo porque no tengo ninguna autoridad intelectual para continuar profundizando en el budismo, ya que es, no tanto una religión sino más bien, un método filosófico y psicológico para comprender la realidad y penetrar en los entresijos de la mente: y esto es algo muy serio. Por eso me abstengo y únicamente hago hincapié en la postura, que si se practica con concentración, esfuerzo y constancia, se obtienen resultados cuantificables en la percepción del yo. 

Todo lo que salga por mi boca, al respecto de las enseñanzas budistas, podría pareceros como si yo estuviera abducido por una secta, ya que soy autodidacta en la materia y, por ende, el camino que he recorrido, hasta la fecha, está salpicado de lagunas. Por eso, lo recomendable, para el que esté interesado es, introducirse bajo la dirección de un maestr@ y en el entorno apropiado. 

Ahora bien, en lo que a mí respecta, llevo más de veinte cinco años practicando meditación zazen, (después de que un amigo, practicante, me enseñara la postura correcta y la compartiera conmigo) y os digo: que no me canso, oye; que cada día está todo por descubrir. 

sábado, 13 de noviembre de 2021

Nada nuevo

        Soy una persona que atravesó el campo gravitacional de la infancia, adolescencia y juventud, tan rápido, que fui adquiriendo cada vez más masa, por lo tanto, mi pasado fue pesado. ¿Eh? No. No es que fuera obeso sino más bien, anoréxico, y cuando intuí que mi futuro se cristalizaría (por comparación) en el de una momia con las vísceras por un lado y el corazón solitario en el esqueleto, ahí empezó todo, porque ¿Cómo podría pensar si no podía sentir, experimentar y todo lo demás? 


Aún no estaba embalsamado y, entonces, de profundis, exclamé: ¡Oh dios, donde me he metido!. Pero, que si quieres arroz Catalina. No hay tío páseme usted el río: acababa de enfrentarme a mi destino y los dioses me castigarían por díscolo. 


Y colorin… Nada nuevo, en todo caso, soy una adaptación contemporánea homologada o, mejor dicho, homo-logueada: porque sí, entré en mi conciencia.  

jueves, 4 de noviembre de 2021

Acepto

Un insecto toma el sol. 

Su cuerpo de clorofila,

con alas y patas largas,

no se mueve del cristal:

mis ojos son la ventana.

En la persiana titubea 

el viento que las ramas mece.

Otro día que renace

y su ritmo me despierta;

calzo el yo que ha reposado

y mi alma se recrea, 

con relativa certeza,

en lo dormido por lo soñado

miércoles, 27 de octubre de 2021

Romeo y Julieta

Colgado en la buganvilla, Julieta,

no hay parte en mi cuerpo sin arañazo. 

Puestos a morir, que muera el poeta,

y a mi, deja que te vea una teta

que estoy más caliente que el rabo un cazo



¡Oh, mi amado! Veo que ardes en deseo

¿¡Cómo se te ocurre escalar en otoño!?

Yo, pasaba por aquí, dando un garbeo,

y me he dicho:¿Por qué no subes, Romeo? 

y ya ves, querida, por casi me escoño!


                   Otro día...


Lindo bulto en el leotardo, Romeo.

Sube y ten cuidado con la enredadera;

no te dejes en las ramas mi trofeo.

¡Para un poco! Que aprovecho mi aleteo

y voy volando a ponerte una escalera


                        Fin


Se acabó lo que se daba, Julieta,

y no hay más chinches que la manta llena.

A tomar por culo la bicicleta,

y, al pan pan, que la vida en el planeta

es sexo y muerte; divina y obscena

jueves, 21 de octubre de 2021

Amor romántico

No te pongas silicona

que me da mucha dentera.

No porque seas tetona,

más culina o más culona,

volverá tu prima, Vera


            *******


¡Oh, mi lúbrica manzana!

¡Aliento en el himeneo!

Entreabre la persiana

que estoy bajo tu ventana

y de aquí no me meneo 


           *******


Sopla viento del norte, muñeca,

lo cual tiene un serio inconveniente:

rajados como madera seca,

hay que untar los labios con manteca,

pero tú, te hallas siempre sonriente


            *******


Sopla viento del norte.

El que los labios seca.

Ya bufe piano o forte,

como obsidiana corte,

mi sinsabor, muñeca

sábado, 16 de octubre de 2021

Los fenómenos

    Para El Budismo: “los fenómenos son de naturaleza dependiente, por lo tanto, no tienen esencia propia, son meras imputaciones nominales de la conciencia”. 
Por ejemplo, supongamos que una cabra está pastando en el monte y hociquea un billete de a cien machacantes ¿Dará saltos de alegría? ¿lo depositará en la oficina de objetos perdidos, o del SEPRONA, demostrando así su posicionamiento ético? ¿se lo comerá? Yo, ahí lo dejo que bastante tengo con lo mío

martes, 12 de octubre de 2021

Dependencia

Nos aferramos únicamente al valor atribuido, por acto de fe, a un papel al que designamos con el nombre de dinero (que por si solo, el único valor que tiene es el del trabajo acumulado para producirlo) y si tanto lo veneramos, es porque la ignorancia y el dogma nos trajinan para no ver en él a la semilla; las nubes que produjeron la lluvia para que la planta creciera; las manos que la recogieron de la tierra, etcétera etcétera… 

Moraleja 

En resumidas cuentas, no hay mucha diferencia entre el papel higiénico y el papel moneda, excepto, que usamos preposiciones y verbos diferentes para designar un mismo fin: con el primero, limpiamos el culo y, por el segundo, lamemos el culo. Ya me entienden ¿Verdad?  

sábado, 9 de octubre de 2021

Sinceridad interna

Tu falsa condescendencia

es tu propio carcelero.

Cuando al palmar tengas audiencia

y la parca te valide,

ni tu ruego pordiosero

te salvará, "palmorive"

jueves, 7 de octubre de 2021

sábado, 2 de octubre de 2021

Altruismo


La esfera en que uno nace, discrimina;

pero tanto el rico como el más pobre,

se mancha los dedos, alguna vez, 

cuando al arrastrar, se rompe el papel

al limpiarnos el culo y, sin querer,

la mano une nuestra naturaleza

martes, 28 de septiembre de 2021

Sufrimiento

El dolor es tan tuyo como mío

cuando nos toleramos.

No tiene dueño.

Es de todos y de nadie. 

Se vuelve indigesto,

cuando es presencia 

sostenida en el tiempo

de un lamento silencioso

que nadie quiere compartir

por temor al olvido de la causa.

La culpa o la venganza, 

es el efecto que persiste 

y cuanto más apego, más sufrimiento.

Las nubes frágiles, 

grises o blancas,

se pasean por el cielo

domingo, 26 de septiembre de 2021

Haikus

Ni el buen portero

puede parar dos balones…

y menos, tres



La fuente brota

para que el río suceda

a toda costa



Es el dinero,

de entre todos los amigos,

el traicionero



Oscila el péndulo.

Las campanas del reloj

suenan prudentes



Una minúscula

nota del canto de un pájaro

cuaja en mi mente

miércoles, 15 de septiembre de 2021

Del contenedor al consumidor


Sabiendo que no hay tutía,

que con su pan se lo coma

el necio con picardía;

pero no se merecía

morir como la carcoma:


sin aliento en el vacío,

apagándose en silencio.

Un plano de su bohío

de frente fotografío

y su muerte reverencio

 

A dios fulano de tal.

Solo conozco tu mote.

Si no fui a tu funeral,

no me lo tomes a mal

y espero que el loto brote


del fondo de la escombrera.

¿Qué le importa al comprador

la raza, sexo o bandera 

de quien la mano metiera

dentro del contenedor?


Nada. Solo existe el yo,

yo y yo y la satisfacción

inmediata. Uno compró

¿Y el otro lo que vendió,

bajándose el pantalón 


o subiéndose la falda,

fue éxtasis o sicalipsis?

El trofeo en una balda;

la envidia verde esmeralda

(si falta algo, es por elipsis)

domingo, 12 de septiembre de 2021

¿Quién es el asesino?

Han matado a Valero, y a mí, están a punto de hacerlo (si no lo han hecho ya) 

Doy fe, de que Valero, 

cuenta cuenta historias jugando al chamelo. 

Y yo, hago la garza en la ducha

y me ato los zapatos con un lazo.

Otrosí, y ambos nos columpiamos en la cadena “el váter”

Ansiolítico

“El sexo es como beber agua salada, cuanta más tragas, más sed tienes”. 


Machácatela con una piedra, que es un buen “ansiolítico”. 


Consulta con tu médico o farmacéutico

Envidia

La envidia no hay quien consiga evitarla,

pero sí, cuando aparezca, tratarla

con cortesía, elegancia y respeto;

o eso, o lo mejor es quedarse quieto

como cuando una avispa se te posa:

si no la acorralas no es peligrosa

Quitamanchas

¿Quién no ha pensado, alguna vez, en sacarse el cerebro y cepillarlo con lejía? Sin embargo, esta fantasía  estética (que da mucha dentera), la podemos sustituir con el perdón y cambio de hábitos

Aquí y ahora

A todos nos encantaría despertar un día con la noticia de que, por fin, la maquina “definitiva” que nos permita viajar en el tiempo, hacia delante o hacia atrás, es ya una realidad al alcance de todos… y no caemos en la cuenta de que, cada instante, es una superposición de pasado, presente y futuro 

jueves, 9 de septiembre de 2021

El deseo

Cada uno somos como

una brizna de pasto

que La Cabra engulle

y el ego mastica…

para construir con excrementos,

una torre, que el cielo alcance. 

Agnus dei


Acabada la misa

de doce en la Catedral,

por la calle del Palau,

el rastro les llevaba

al altar sobre el suelo

de Nápoles y Sicilia,

donde eran degollados,

sin honra, los corderos

miércoles, 1 de septiembre de 2021

Copla para mi gato



Mi gato sabe de todo.

Yo aprendo como los gatos,

de un vistazo 

Si no hay salida me jodo,

pero abrocho mis zapatos

con un lazo


Mi gato, cuando se lava,  

con ritmo mueve la lengua

concentrado

Yo lo hago con la baba,

pues, mi dentadura mengua

un puñado


Por la boca muere el pez,

eso mi gato lo sabe,

y subrayo:

ya lo sé para otra vez,

cuando él en seco se lave,

yo, me callo


Mi gato toca el violón

y yo me como la gamba

con cabeza

El hambre me dio ese don,

y el de tocar bossa y samba

con torpeza


En mi regazo le mezo.

Cuando duerme me parece 

que medita

Despierta con un bostezo

y hace lo que le apetece 

¿o le admita?


Mi gato sabe muy poco

del goce del himeneo,

más bien, nada

En esto no me equivoco:

somos dos por lo que veo,

camarada


Restriega el húmedo hocico

en mi nariz y, con esto,

me da un beso

Yo le digo: ¡Anko, bonico!

Y acaricio el lomo enhiesto

de un maeso*


A mi gato le llamo "Anko",

relleno del “Dorayaki”

japonés

De tono marengo y blanco,

empalaga como el caqui

Gracies. De res



*Maeso= maestro en desuso


sábado, 28 de agosto de 2021

Cuento sin final

 

Repleta de tiburones,

el feroz ogro, en la chepa,

lleva un arca

En castillo, con dragones,

se defienden en la estepa,

de la parca


De adobe sus torreones

la paz por sus muros trepa

y no abarca,

su brazo, los corazones:

mejor que lo cuente, Pepa

Delabarca


Anexo


Manchan de azul ultramar,

y de rojo bermellón

pintan las mil y una noches

jueves, 26 de agosto de 2021

Suicidio asistido


Dices: "no puedo más y aquí me quedo" 

y arañas las paredes de tu celda.

Cuando pierdes las uñas de los dedos,

persistes esculpiendo tu dolor, 


desde dentro a fuera, mientras te quedan

dientes para hacer cruces en la piedra.

Tienes metástasis y no hay quien pueda

pararla. Viene en tu ayuda corriendo.


Te hundes en el agua, se apaga el fuego 

de tu cuerpo y exhalas el aliento,

lentamente, hasta quedarte sin aire.


Ya, exangüe, con sus brazos, te recoge 

una dama amiga a la que imploraste

libertad y soplara tus cenizas

martes, 24 de agosto de 2021

Sin embargo

No estoy a tu altura en cuanto a, formación intelectual,

posición social y medios materiales.

Sin embargo, apelo a tu inteligencia emocional,

(más que a tus sentimientos religiosos

de caridad o de condescendencia)

para tender un puente entre tu humanidad y la mía

domingo, 22 de agosto de 2021

En la mente del asesino en masa

Hasta el sol que nos da la vida, mata

(y la tierra, el aire, el agua);

pero no es un homicidio premeditado,

en todo caso, imprudente

en la infinita dimensión del universo

(y para muchos, su fe quebranta);

en tanto que, a dos palmos de nuestras narices,

con miles de inocentes, pasa lo que pasa,

y no pasa nada, porque somos cómplices con nuestros deseos.

Los que aprietan el gatillo o toman decisiones por ti y por mí,

no son otra cosa, que el brazo ejecutor: un asesino a sueldo

sin nada personal que lo motive

Últimas caladas

Apuro hasta las últimas caladas,

de los últimos cigarrillos,

del último paquete de tabaco,

porque el estanco ya cerró

y me pilla lejos el que está de guardia 

jueves, 19 de agosto de 2021

Soberbia y aceptación

Cada cual se forja a golpes

como la espada del guerrero,

y, hasta el mejor acero,

se rompe en el campo de batalla.


Como el león orgulloso

que luce su cabellera,

y, ralo como un tiñoso,

se va, cuando la hora le llega

sábado, 14 de agosto de 2021

Encerrado por vacaciones



Es hora de parar y leer un libro,

o, al menos, desearlo.

Yo lo hice, y desde entonces,


como pan de una montaña venerable,

en cuya cima, brillan,

las gotas de agua de las nubes.


Es hora de recuperar el cuento

que nunca te leyeron,  

o el parque en el que no jugaste.

 

La pobreza de estímulos, hizo de ti, 

(y de mí) un niño introvertido,

encerrado por vacaciones 


en el aula de la calle.

Y una cosa lleva a la otra...

En fin, tú, ya me entiendes.


Pero, ya ves, nunca es tarde

mientras estás vivo

y tengas cuidado con lo que desees

martes, 10 de agosto de 2021

Con la mente vacía

No existe música buena o mala.

Todo depende del momento, la intención

o el método con el que la escuches.

Hasta la flauta que hizo sonar el burro  

puede inspirar parte de una sinfonía

¿Quién sabe, si escuchando con la mente vacía…?

Ahí está “El Vuelo del Moscardón”

o el paseo del “cisne” por un lago

lunes, 9 de agosto de 2021

Miedo en Mi menor


No pierdo de vista el rostro del miedo,

a lo mejor tiene que decirme algo

y en vez de sulfurarme o huir, me calmo.

Los leones resbalan en el asfalto.


Al contrario, los ogros y fantasmas

me persiguen y atrapan en la bruma

del inconsciente. Allí, el ego no manda.

Deja la nave a la deriva y salta


sobre una balsa, flotando con engaños

en el agitado mar del pasado.

En la orilla, una figura menuda,


mira el mar y, serena escucha, cómo

sopla el viento andante y, el “Mi menor”,

camina respirando moderato

miércoles, 4 de agosto de 2021

Haiku

Si te deprimes

en Agosto, eso es buen síntoma

porque estás vivo

De “El Régimen” y el contenedor

En unos cuantos sacos de arpillera
cabe una vida entera.
Donde antes hubo pitillos,
en el papel hay escritos
trazos con aroma a tabaco
barato: Celtas e Ideales 
(y caros e inalienables, 
derechos sacrificados).
Adormecidos, colman un contenedor
en promiscuidad, apretujados; 
queriendo resurgir, gritando:
¡La libertad se ha perdido
y “El Régimen” es una patraña,
quincalla que encandila ilustrada por el clero!.
Son como un blog atrapado en la red 
de un autor enamorado,
pobre, mal querido, 
al que nadie le ha leído;
pero, un trapero, con síndrome de urraca,
les dio cobijo en su nido
y esperó a que brillaran

sábado, 31 de julio de 2021

Mindfulness

Nací para gacela

y al más mínimo ruido salto.

Nunca corrí detrás de nada,

siempre delante de todo,

como lo que soy, presa


Del instinto sin consciencia

se apodera el miedo,

y con él, la irreflexión.

Buenas caderas y piernas

me llevan hasta donde puedo 


Apóstata de la clase obrera.

Desleal con el rebaño,

la selva se me apodera,

en tanto que, nacido para gacela,

soy presa y siempre atento  

miércoles, 28 de julio de 2021

Elogio de mis mujeres

Sí; pero no. No es como me lo cuenta

el policía del alma y recuerdo, 

pues, la mentira huele cuando fermenta.

Si bien, de más joven no me di cuenta,

no; pero sí: me porté como un cerdo


Tocaba el piano con guantes de lona,

por eso, no hubo elogio ni ovación.

Fue mi conducta insensible y burlona.

No se quedó ninguna solterona,

no; pero sí: me quedé solterón


A unas elegí y otras me eligieron.

A unas las perdí y otras se marcharon.

Sí; pero no, al manicomio no fueron,

no; pero sí que el cielo abierto vieron

cuando, a la postre, de mi se libraron

domingo, 25 de julio de 2021

Por si me llaman poeta

Me llaman poeta

y yo, moriré sin saber 

qué es la poesía.

¿A no ser que sea: 

envidia de la belleza,

música para sordos,

cine para ciegos,

el grito del mudo,

el pan del crítico manco…?

No sé, solo es una sospecha.

Escribo como un niño, jugando

para adornar el tiempo

con sinceridad interna;

y si me llaman poeta,

es porque, a intervalos,

junto al teclado,

el café se va enfriando

miércoles, 21 de julio de 2021

martes, 13 de julio de 2021

El ci(s)ne mudo


Entre mito y ceremonia,

sobre el agua mansa 

nada un cisne

y en la cama descansa 

un cuerpo frío.

Con absoluta certeza,

ni el cisne canta

ni el cuerpo es mío. 

No importa bajo que forma,

vivo porque de mí dan cuentan:

la tierra, el fuego, el aire, el agua

y a cada instante me lo recuerdan

llamándome por mi nombre,

esa es la diferencia.

Yo elijo las mejores tomas,

monto mi película,

escondo los recortes

y les privo de su música

domingo, 4 de julio de 2021

REGRESO

Con veintinueve años me suicidé.

Lo recuerdo con alivio.

Pasaba el tren de la vida 

repleto de cáscaras y culpas,

y, con determinación, me arrojé. 

La máquina me hizo trizas.

Los trozos de ignorancia,

de sufrimiento por todo,

migraron al purgatorio,

y, poco a poco, con certezas

y el pulso de un cirujano,

a solas, me recompongo

martes, 29 de junio de 2021

LIBERTAD

Un pajarillo piaba

en el borde de mi ventana

Con alas fuertes se despide.

Dice adiós y da las gracias

miércoles, 23 de junio de 2021

¡Que vienen que vienen!

El Buda estaba en lo cierto:

nacemos y envejecemos;

enfermamos y morimos,

y... al Rastro van a parar,

(y muy a nuestro pesar)

los restos


El Buda estaba en lo cierto,

yo no sé de ningún muerto

que baje del purgatorio

(sería contradictorio)

andando


Y el que no sea budista,

que pida a Nuestro Señor,

una visa de turista,


y baje a por su tesoro,

que quiso dejar en prenda,

y corra como un meteoro


Por el cielo del mercado,

la mala conciencia vuela

y ves lo que quieres ver,

si te quieres esconder,

pues, tápate Maricuela...

Por el mar, un portaviones,

y en el cielo, un zeppelín;

volando quinientos drones

con tan malas intenciones

de al caos ponerle fin


Ay! En medio me sitúo:

si queremos que haya paz,

tiene que haber “quid pro quo”


En honor a la verdad

¿Quién madruga, en domingo,

pa hacer obras de caridad?


“Ay! El que mucho fornica,

pa ahorrarse los condones,

la polla se plastifica”


Un cuco puso un huevo

en el nido de un buitre

y desde que salió el polluelo

la cara de gilipollas

no hay quien se la quite


Los buitres siempre se quejan,

quieren comérselo todo,

y comen... lo que le dejan 


Lo digo aunque me salpique,

que yo, en mis mejores tiempos,

tenía fama de buitre

 

¿El rastro tiene de todo?

Nos falta para alegrarnos,

cuando tenemos buen día,

una sección de perfumería

para poder perfumarnos


Si te quieres perfumar,

pues, ándate con cuidado.

Yo vi a mi padre tirar,

por arriba y por detrás,

el hígado granizado 


¿De donde viene la luna

con su carita lavada?

¡A ver donde desayuna!


Se acabó lo de maltratar,

por siempre, a nuestra alma máter:

hartos de ser tan guapos

y de mear colonia,

nos vamos a columpiar

en la cadena del váter


Óyeme lo que te digo:

edúcate como puedas,

que no hay ningún cocodrilo

jueves, 17 de junio de 2021

KU, SUNYATA

 

A la hora de crear,

no hay musas sino oficio

y estar dispuesto al sacrificio

porque lo vas a regalar.


Para mejor hacerme entender,

Sócrates viene al caso,

pues, cobró más que Picaso…

de los puños de su mujer.


Y si alguien le preguntaba

por un ojo a la virulé, 

decía: perdone usted,

“yo, solo sé que no sé nada”.


He aquí el quid: NADA.

Todo es interdependiente 

y su forma aparente

por el concepto viene dada.


Fama, poder, celos, 

los tratamos como sólidos

y al atraparlos son líquidos

que escapan entre los dedos.


El ego engaña a la consciencia

Lo que no le gusta lo proyecta

Día a día hay que estar alerta:

al YO, lo neutraliza la paciencia

martes, 15 de junio de 2021

LA PRUEBA PILOTO 2

 

Las luces de la etnología
alumbraron al concejal
en la ciencia del “cagal”
llamada coprología.
Y nos tocó la bonoloto,
pues, una prueba-piloto
que no mucho duraría:
dura hasta hoy en día.
La prueba con sus razones,
son cabinas-urinarios
donde saldar apretones
vendedores y usuarios.
Con tres habría bastante,
y luego, más adelante,
así se viera el sondeo,
habría actualización.
¡Como no, en proporción
según el canon filisteo!.
La nota daba la brasa
sin faltas de ortografía;
mas, gentes que no tienen casa
o vienen de otro planeta,
no saben de cortesía
cuando se van de vareta.
Y se van por bulerías.
Pepes, Basilios, Marías,
orinan con malas artes;  
se jiñan por todas partes,
embarazando los suelos,
paredes y rincones
con tales cagallones,
que a las vacas le dan celos.
Las moscas con sus revuelos,
cuando las calandrias cantan,
por miles, millones yantan
hasta hartarse de “gandinga”.
Tienes que salvar la minga
de las moscas voraces
que se empeñan contumaces
en dejarte hecho un eunuco
¡y te entra un repeluco!
Un riachuelo de purines
de las cabinas mana
y al Rastro lo avillana.
Si celaran querubines
como cuando vino el Papa,
que no hubo punto en el mapa
donde no hubiera letrina
para aliviar los intestinos,
pues, cristianos con palominos,

va y quebrantan la doctrina.
¿Hasta cuando tanta inquina
y tanto noster páter
y tanta prueba-piloto?
¡que nos compren una moto
o que pongan manillar al váter!

DESAPEGO

Eres un destello desvanecido.

No te echo de menos ni de más,

y en todo caso, ni me debes ni te debo,

así que, estamos en paz.

No te ofendas: hasta aquí hemos llegado.

sábado, 5 de junio de 2021

MANTRA COMPASIVO

 

En mi corazón (¡Ay!) hay:

un niño medroso,

un joven engreído,

y un viejo amable

que nos abraza 

y alivia el peso 

del formato original 

de los recuerdos.

En el proceso, 

repite un mantra:

lo siento a mares

¡Cómo lo siento!

miércoles, 5 de mayo de 2021

El pasado se lo llevó…

La historia que os cuento

De primera mano

Desde mi nacimiento:

Ya  “cautivo y desarmado”,

el pueblo, y él, un anciano


Yo, en esos momentos, 

como era un bebé

sin dogmas ni credos,

El “Régimen”, para mí,

Era comer cagar y tirarse pedos 


La iglesia del cuento

Con agua bendita

Ungía al elemento 

Que era fiero como un lobo

Con voz de Caperucita


Lo había descubierto 

Estaba en un salmo

Lo daba por cierto 

Que en el mundo menos él

Todos la tenían de a palmo


Taimado, el sujeto,

por obvias razones,

guardó su secreto:

proyectando sus complejos  

en fusiles y cañones


Le bailaban el agua

de Una Grande y Libre   

Patria policial

El que no se la bailaba:

A picar piedra a El Escorial


Rodeado de tubos

Sonaba el clarín

No vio el descabello  

Y al pájaro mojigato

Le llegó sus San Martín

 

No quiero ir al cielo

Por si me lo encuentro

Sentado a la diestra 

El que anduvo bajo Palio

Hoy la historia lo detesta


Al perro que ladre

Que lo eche de menos

Que fomente el oído

Le diría que el pasado

se lo llevó su puta madre

miércoles, 21 de abril de 2021

miércoles, 10 de marzo de 2021

EL MISTERIOSO CASO DEL REÍR


Eres un niño aunque no lo aparentes.

Yo, ya los sesenta y seis araño,

y no sé ni cómo me las apaño;

pero a mí, me están saliendo los dientes.


No los necesito para reír.

Si acaso, para comer y hablar claro

como lo hace un párvulo, con descaro:

habla y ríe sin nada que encubrir.


No me tapo la boca con la mano.

Cuando me río se muestra la mella,

si no la misma que tuve en la infancia,


es el mismo rasgo que me hace humano.

Reír, por algún motivo, deja huella:

y es porque tiene la misma sustancia


sábado, 20 de febrero de 2021

MÁNDAME...

Mándame un ¡eSeMaeSo!

Para curarme del todo.

A mi corazón regreso

que con el afecto expreso,

no puede ser de otro modo

CERTEZAS

El corazón

no se endurece con una

mente flexible


El loto crece

desde el fondo cenagoso

del corazón


Salta el guijarro

sobre las tranquilas aguas

de aquí y ahora


Ante mis ojos,

los arces de rubio otoño,

peinan sus hojas

viernes, 19 de febrero de 2021

PENOSAS RABIETAS DE ADOLESCENTE

Dedicado a las primeras críticas que recibió la nueva ubicación del rastro de Valencia, por parte de algunos compradores


Campaban por la selva los leones

acechando a sus presas favoritas,

y en la caza, al no haber leyes escritas,

tampoco hay igualdad de condiciones.


Elige: búfalo, cría o cebú,

que cazar es como un juego de envite.

El jugador de ventaja se admite,

pero... hay veces en que el primo eres tú.


Dejando las metáforas a un lado;

hipérboles, hiatos y sinalefas;

en el rastro, hablando claro y corriente,


el más tonto hace relojes. Y añado,

que son tus “mofas, escarnios y befas”,

penosas rabietas de adolescente

viernes, 12 de febrero de 2021

CANCIÓN PARA UN DESNUCAO Y MEDIO


Siempre a mano la petaca
“El Bambú” y “ el cuarterón,
y el coñac de “garrafón”
en aquella España opaca.
Como era guarnicionero,
las heridas se cosía.
Mi padre, me lo decía:
así se cura el obrero.
Tomé conciencia de clase
y dejé de ir a la escuela.
Tomé clases de curdela.
Fui militante de base.
El arbitro se dio cuenta
y pitó fuera de juego.
Yo me libré del talego
y los míos de la afrenta.
De mayor, fui al cirujano
a curarme las heridas
de las batallas perdidas
en el continente urbano.
Crucé un río, y en la orilla,
me mantuve esclavizado
por dormirme encadenado
a mi propia pesadilla.
Lágrimas que humedecían
el filtro del cigarrillo.
Llorando como un chiquillo
los buitres se me comían.
No pensé que llegaría.
“La vida te da sorpresas”.
Renace de las pavesas.
¡Me quemó la epifanía!
No voy a cambiar el mundo.
Lo que quiero es abrazarlo,
comprenderlo y no mancharlo:
está el pobre moribundo.
Lo que tengo de santón,
lo tiro por el retrete.
Ni corbata ni bonete,
ni peto en mi corazón.
Un nido de pajarillos,
apostado en mi ventana,
me anuncia cada mañana,
que mude de calzoncillos.
Por la ventana mirando,
veo el sol cuando amanece.
La luz que me pertenece,
con mi karma estoy pagando.
Me paso horas contemplando
y otras tantas escribiendo;
de aquí allá, yendo y viniendo
sobre una nube volando.
La certeza de la nada
que tengo bajo mis pies,
descarga, antes o después,
energía acumulada.
Juro por los siete dientes
del cráneo de Cervantes,
que somos los inmigrantes
uno de los ingredientes
para hacer el estofao
con el que todos comemos.
Nos tienen miedo los memos
y algún que otro desnucao
que se aferra con cinismo.
Lo bueno es, que no lo sabe,
que hasta que no se le acabe,
come mierda en el abismo.
Con un poco de paciencia,
dejo que el amor me eduque,
para que no me desnuque
ya perdida la inocencia.
Mi familia cogió un tren.
De mi tierra no me olvido;
de las lomas y el olivo:
soy de Linares, Jaén.
Y así llegamos de paso
como las nubes, las olas,
con una maleta a solas
y una póliza en OCASO.
Qué importa donde nacer,
si es un tránsito la vida,
no hay del todo despedida
y mucho que agradecer.