viernes, 29 de diciembre de 2017

EPIGRAMA

Es como un juego la vida
hasta que llega la muerte:
ni con trampas ni con suerte,
se le gana la partida.

AUTOESTIMA

Fui cobarde y fui valiente.
Ni anodino ni brillante.
A lo sumo, equidistante.
En resumen: buena gente.

miércoles, 27 de diciembre de 2017

FANDANGO


Por mi buen comportamiento
A los que me han perdonado
por mi buen comportamiento,
gracias, para eso he luchado;
pero, la culpa que siento,
aún no me la he quitado.

viernes, 22 de diciembre de 2017

sábado, 9 de diciembre de 2017

UN CUADRO SIN FIRMAR: (Cuento de Navidad)



Un niño duerme en su carro.
La madre entretiene al frío
(que es enemigo en invierno
y en verano deseado)
para que no lo despierte.
Monta la parada, el padre.
Abre el día, y ya los nimbos
han tomado posiciones
en el cielo democrático:
es la anunciada tormenta.
Temen que llueva. Y va y llueve.
Una hora, dos, tres, cuatro horas.
La lluvia para y arrecia.
Se produce la estampida.
Más que pánico hay tristeza.
Todos los que se han quedado,
por crédulos o encelados,
no solo han perdido el día,
sino toda la cosecha.
Como zona catastrófica,
queda El Rastro: desolado,
sin nadie que firme el cuadro.

PARA SER

Si alguna espada he blandío,
ha sío la de aprender.
Cuantos tajos le he metío:
por bellaca, a la ignorancia
y al orgullo, por crecer.

lunes, 4 de diciembre de 2017

CON SU PERMISO.


Que conste, que esto es meterme en camisas de unce varas. Pero, en mi opinión, que eso sí que puedo hacerlo, todo lo del Procés ha sido una charlotada. Lo que parecía que iba ha ser un asalto al Palacio de Invierno de Petrogrado, en un ambiente épico-festivo, al final ha resultado ser una cagada y, como no van ha dar su brazo a torcer (están en su derecho) en cuanto a reconocerlo en público, mantenerlos en prisión, es “darle tres cuartos al pregonero”.

Como supongo que, el último recurso que les queda ya, es el de recurrir a la cuna de la democracia, La Atenas de Pericles, recurro a su mitología para intentar encontrarle una explicación que quizá se halle, entre líneas, en La Líada (del Procés).

No se puede, así como así, soliviantar a los dioses. La Hibris, tanto a los de ocho apellidos como a los de uno o ninguno, los ha desquiciado tanto que, al final, como en las mejores tragedias y relatos griegos, Némesis ha tenido que aparecer (aquí, en forma de artículo 155) para restaurar la cordura.

Aunque el quebranto emocional y económico perdurará durante tiempo, veo improcedente, lo de que tengan que pagarlo con cárcel el lío que han formado, por más que la cagada haya sido memorable y digna de ser retransmitida. Yo, a todo esto, buscaría otro tipo de penitencia. Un suponer, que en vez de que tengan que hartarse de “garibolos en la estariipé”, hacerlos Socios de Honor del Real Club Deportivo Espanyol de Barcelona y, que tuvieran que acudir al placo, domingo sí y domingo no: a firmar, por lo menos. Y, si fuera residente en Cataluña y tuviera que votar, más bien, se lo diría cantando (si supiera cantar) este fandango que mi primo ha compuesto y lo titula: A LOS ILUMINATI. Dice así:

Si, con la misma retórica,
me queréis vender la moto,
tengo dudas razonables:
no sé, si daros mi voto,
o, ponerle un manillar al váter.