martes, 9 de mayo de 2017

EL RASTRO POR SOLEARES

Fui de madrugada,
con una mano detrás y otra delante,
y El Rastro allí estaba.

El Rastro nada me debe,
yo al Rastro le debo to:
toa la gente que me quiere.

Conmigo fue generoso,
a cambio no pidió nada
y aprendí de todo un poco.

Solo tengo un enemigo;
pero éste vale por tos,
y no es otro que yo mismo.

Era tan pobre, el pobre,
Que, al funeral, fueron amigos,
y a su boda, acreedores.


No hay comentarios: