Son mis fotos,
por más insignificantes,
gotas congeladas
del río de la vida.
El reencuentro
con la mirada
cálida del corazón,
las hace volver al cauce
de los sentimientos;
a fluir derretidas
por el almanaque
de la mente;
a permanecer vivas
en las paredes sobrias
del presente
No hay comentarios:
Publicar un comentario