Para abrir una latilla
de conserva,
hay que tirar de la anilla.
Si se observa,
el gesto, es como el de armar
una granada de mano.
Si te pones a pensar,
no deja de ser kafkiano:
el primero, mata el hambre
de inmediato;
el segundo, mata al hombre
y es barato
No hay comentarios:
Publicar un comentario